y posas tu palabra en mi desnuda carne
y renuevas mi sangre, y la calientas?
Juguemos con la lunática noche
a dibujar mi voz en tu boca,
a danzar con música de agua.
... Me crispa este sutil secreto
mientras amablemente hablamos
de las mil noches y una noche.
Orietta Lozano