La Cita

 ...

Me he ceñido toda con un manto negro.

Estoy toda pálida, la mirada extática.

Y en los ojos tengo partida una estrella.

¡Dos triángulos rojos en mi faz hierática!


Ya ves que no luzco siquiera una joya,
 ni un lazo rosado, ni un ramo de dalias,

y hasta me he quitado las hebillas ricas 
de las correhuelas de mis dos sandalias.



Mas soy esta noche, sin oros ni sedas,
 esbelta y morena como un lirio vivo.

Y estoy toda ungida de esencias de nardos,
y soy toda suave bajo el manto esquivo.


Y en mi boca pálida florece ya el trémulo
 clavel de mi beso que aguarda tu boca.

Y a mis manos largas se enrosca el deseo 
como una invisible serpentina loca.



¡Descíñeme! 

Bajo tu mirada surgiré como una
 estatua vibrante sobre un plinto negro

hasta el que se arrastra, como un can, la luna...

Juana de Ibarbourou