Mediterráneo

*
Mi cinturón aprieta tu cintura, y tu sonrisa, mi corazón.
Sobrevolamos las islas indecibles y
 a nuestro paso, las nubes se disipan.
¿Cómo regresar al beso la armonía sin que la respiración se entrecorte?
¿Cómo planear la noche compartida después de tanta ausencia?

Sólo el aire es aliado nuestro
porque nuestro deseo es de aire puro.

Cuando descendamos a la tierra las alas deberán seguir batiendo;
el aire de las alas es nuestro sostén único
y las alas del aire nuestro lecho.

Desembocan los ríos en los mares azules
como en tu pecho desemboca el mar.
Abrázame en tus alas para que otro aire no me roce,
sino tu aliento, del que vivo y muero.

Bajo el cielo impalpable
hecho de luz y espera,
abrázame, amor, con tus alas.

Abrázame sobre la corrompida ciudad sagrada de los hombres.

Antonio Cala



Fotografía : Golden light
Por:  Furstset