No te merezco, no.
Yo canto, y te quiero, sí, te quiero,
y sé que hasta tu cima me levanto.
Pero no es en tu cima en donde canto,
sino en el valle en que me desespero de no poder vivir siempre señero,
y callar, callar sólo, quererte tanto.
Oh, bajo y pobre mundo, limitado poder de la expresión,
oh lengua mía... en cambio tu mirada, qué logrado silencio
y poderosa luz del día.
Tú me devuelves más de lo que yo te he dado,
pues tú eres tú ... yo sólo mi poesía.
Vicente Gaos
(extractos)
Fotografía : A gentle touch
Por: Găv Ruş
Fotografía : A gentle touch
Por: Găv Ruş