Barry Jazz

Una de las cosas que amo es el arte a Carbón, ya sea en bosquejos o como obra, es una de las ramas del arte visual que más me han atraído. Y si hablamos de realismo a Carbón, imposible no mencionar a uno de los que para mi, lleva toda las de ganar.
Les hablo de Barry Jazz Finnegan, un artista autodidacta que se dedica y especializa en el realismo fotográfico a carbón. 
Les dejo una muestra de su gran talento plasmando en fondo virgen a un gran hombre. 
Enjoy! 



Where Soul Meets Body

*
“Entiéndeme. No soy como un mundo ordinario. 
Tengo mi locura, vivo en otra dimensión y no tengo tiempo
 para cosas sin alma...” (Charles Bukowski)
Por: Justin Rosenberg

Misiva

*
Te escribo palabras de fuego con lápiz rojo.
Si te hablo del beso es ya besarte un poco.

Josep Palau i Fabre



Fotografía de Svetlana Belyaeva

Untitled

*
Quisiera destejer tu epidermis de seda
para hacerme un cobijo de ensueño, en noche fría.

La seda junto a ti, araña mis diez dedos,
que se abren, desvelados,
para adorar su dueño.

Dibuja el agua caricias en la orilla.
El sueño fina, retrocede a su origen.
La vida es ya la vida.

Un corazón lo tengo todavía.
Corazón con su llanto y su alegría.

Corazón ... demasía

Josep Palau i Fabre
(extractos)



Gráfico y fotografía de: Sergey Mikhalyuk

El Primer Amor

*
Estoy enamorado de mi primer amor.
Fieles al corazón, los ojos, su imagen ha tatuado.
Las lluvias del invierno a el me han llevado;
bello abrigo nocturno en pleno resplandor.

Josep Palau i Fabre

El Imposible

*
Si fueses espíritu, amor, yo te amaría. 
Abrázame fuerte, que tus brazos son débiles, 
no llegan a mi cuerpo, tan recóndito en mí, 
y mis brazos son débiles para atraerte allí. 

Si pudiera tan sólo amarte, amor, yo te amaría. 
Fueses rostro y fuese yo rostro, tan sólo, 
podríamos adoramos el uno al otro, 
dejar tus labios y besar tu sonrisa, 
mirarme en tu mirada para hallar mejor vida. 

Fueses reposo y sueño y ensueño que abriga, 
serías para siempre, amor, mi única compañía.

Josep Palau i Fabre

Poemas del alquimista



Fotografía : Red woods
Por: Rishab Lamichhane 

Triunfo de Alta Locura

*
Me yergo en lo más alto de mí mismo y miro; 
y me veo más transparente. 
Yo no sabía, no, que el viento pudiera tener mi cabellera 
y gozarse con ello. 
Ahora todo instante me enardece y me lanzo, desde mí, 
a cielos, abismos, rutas sin fin. 
No tengo tiempo para amar; no tengo el brazo lo bastante largo 
para poderos apresar, para alcanzar la vida. 

Y, para que lo sepáis,
 aprendo a escribir en prosa la rosa. 

Josep Palau i Fabre

Fragile

Por: Furstset

Tú Eres Tú

*
No te merezco, no. 
Yo canto, y te quiero, sí, te quiero, 
y sé que hasta tu cima me levanto.

Pero no es en tu cima en donde canto,
sino en el valle en que me desespero de no poder vivir siempre señero,
y callar, callar sólo, quererte tanto.

Oh, bajo y pobre mundo, limitado poder de la expresión, 
oh lengua mía... en cambio tu mirada, qué logrado silencio 
y poderosa luz del día.

Tú me devuelves más de lo que yo te he dado,
pues tú eres tú ... yo sólo mi poesía.

Vicente Gaos
(extractos)




Fotografía : A gentle touch
Por: Găv Ruş

Cuando el Amor no Dice la Última Palabra

*
La tarde pastoral de alterno cielo, 
rayos de tu tormenta desatados,
mas luego azul total, cielo amados,
me llena de pasión o de desvelo.

Asciendo así del tormentoso anhelo
a una paz de reposos entregados,
mas desciendo otra vez a los estados mismos 
de que partí para mi vuelo.

Ay, esta indócil pleamar me inunda,
esta tarde frenética y liviana.
Déjame, pues, sí, deja que me hunda en este frenesí de lluvia vana.

Luego me elevaré hasta ti, profunda.
Luego serás mi primavera humana.

Vicente Gaos



Fotografía y gráfico de Svetlana Belyaeva

Noche del Amor

*
Ay, qué podré decirte, dulce amor,
que no conoces en un cielo cerrado, 
suaves roces, el peso del amor, 
noche entregada.

Desde este corazón, isla olvidada,
- oye del mar sus clamorosas voces -
me elevaré hasta ti que desconoces
la flecha que en lo oscuro está clavada.

Los cuerpos se revuelven tan certeros,
guiados del amor, como esos astros que, 
arriba, sólo ven tus ojos puros.

Òrbita de pasión y verdaderos,
resplandecientes e infalibles rastros.
Celestes nuestros cuerpos aunque oscuros.

Vicente Gaos




Fotografía: Everything is dissolving
Por: Găv Ruş

Amor

*
¡Qué profundo es mi sueño!
¡Qué profundo y qué claro, qué transparente es, ahora, el universo!
Si pensando en ti, siempre, si, soñando contigo, me desvelo,
y te miro por dentro, con mis ojos, 
si te miro por dentro, veo la oscura entrada de mi vida,
tu sorda luz de fuego, y ya no sé si a ti te estoy mirando,
o si contemplo el cielo; el último transfondo del poniente,
sin nubes y sin velos, más arriba de todas las estrellas,
donde está Dios, despierto, o el inicial trasfondo de la noche,
donde estás tú, durmiendo.

Y yo sobre la tierra, oscurecido por tanta luz, 
yo, ciego, soñando en Dios, soñando en ti, 
soñando lo mucho que te quiero.

Vicente Gaos

La Voz Precisa

*
Sella tú con tus labios, éstos míos.
Pon tu mano en mi mano.
O deja que acaricie tu cabello,
tus mejillas, tu frente,
mientras hundo mis ojos en tus ojos,
en la insondable luz de tu mirada.

Deja que, así, te exprese, cuando huyen las palabras
- ay, expresión del tacto, única voz precisa -

Deja que, así, 
te exprese mi ternura.


Vicente Gaos



Fotografía: Undergrowth
Por: Adi Dekel

A tu Cintura

*
Oh, delgado contorno de la vida.
El fluir de la sangre en él acaba.
Oh, columna de luz y ansia de lava.
Volcán para mi mano estremecida.

Límite de la tarde preferida, bajo un torso de niebla enajenada.
No hay tránsito a la noche enamorada, pájaro sometido y sin salida.

Oh, ese cerrado cielo en que se unen el poderoso mar
 y el labio suave de la tierra; horizonte atormentado.
(...)
Oh, la flecha de Dios en tu costado. 

Vicente Gaos

Te quiero y Te lo Digo

*
Toda la luz del cielo ya en la frente y en el labio un carbón apasionado.
Mi pensamiento, así de iluminado,
mi lenguaje, de amor, así de ardiente.

Así de ardiente, así de vehemente, 
diamante en su pasión transfigurado.
Amarte a ti, universo deseado.

Mi luz te piensa apasionadamente,
mi luz te piensa a ti, luz de mi vida,
pasión mía, fuego mío, 
llama mía inmortal, noche encendida,
cauce alegre de mi profundo río,
arrebatada flecha, 
alba elegida, 
mi dulce otoño
...  mi abrasado estío.

Vicente Gaos




Fotografía de David Dubnitskiy

Sin Palabras

*
Un mundo de armonías me rodea.
Fuera palabras, no turben mi paz.
Una vida hecha toda de sonidos, un pensamiento universal
 que puede prescindir de cualquier significado.

EL universo no habla, nada dice, el viento mueve diáfano la hoja.
Paraíso final sólo de música musical. 
Canta el pájaro en lo hondo del corazón. 

Palabras, fuera. 
Ahora un mundo de silencios me rodea.
Música, sólo música, callada música. 
Siempre música, esto es Dios.

Vicente Gaos



Fotografía: forever and a day
Por: Rosie Anne Prosser

Y de Repente Dije

*
Y de repente dije: Esto es la vida. 
Esto y no más. Palpé su forma cierta. 
La adiviné mortal. 
El alma, alerta, 
vibró un instante toda estremecida. 

El rojo amor con honda sacudida 
-oh vida, oh viento- abrió la última puerta. 
Y allá en el fondo de la estancia abierta, 
brilló mi muerte entre la luz dormida. 

Esto es la vida, dije, esto es la muerte, 
ésta la tersa luz, la honda luz suave, 
la cósmica pasión, el sueño inerte. 

Esto eres sólo, sí. 
Y con paso grave me adelanté hacia el fondo para verte, 
llegué a la puerta y di vuelta a la llave.

Vicente Gaos



Fotografía: Dark Rose Night
Por:  Roberto Rinaldi

Faut-il S'abétir?

*
-¿Hacia dónde vamos?
-Vamos hacia el sueño...
-¿De dónde venimos?
-Venimos del sueño...

Como las olas, como los vientos...
(En vida, despiertos. En vida, serenos sobre el fuego.)

-¿Hacia dónde vamos?
-Vamos a la noche...
-¿De dónde venimos?
-También de la noche...

(En la vida, brote la luz, que el sol nos conforte.)

-¿Hacia dónde vamos?
-No vamos, no vamos...
-¿De dónde venimos?
-¿Por qué preguntamos?

Después lo veremos si al fin vemos algo.

Vicente Gaos

Preguntas a la Luna

*
¿Adónde vas, cruzada por veloces nubes,
 celada en vaporoso encaje de nubes, 
resbalando entre un celaje de nubes blancas, 
por las hondas hoces de la distante noche? 
¿Qué almos roces de Dios ordenan tu impasible viaje
por el inmenso azul?
 ¿Tras qué ramaje de estrellas bogas? 
¿Qué silentes voces  altísimas escuchas?
 ¿Por qué tienes el rostro virginal tan encendido,
tan dulce y triste, oh sí, tan dulce y triste? 

¿Adónde vas? 
¿De qué regiones vienes?
¿ Quién da a tu rostro ese celeste olvido?
¿Qué Dios sin fuego con su luz te viste?

Vicente Gaos

Ni a Favor de Platón ni Contra Ti

*
Qué más da si quemaste tus días tras ficciones,
si en la arena elevaste tu mundo imaginario soñando con tesoros 
en los golfos de turno.

Qué más da si de noche viste en ellos la vida, 
y, a la mañana, no eran lo que ayuda a vivir.

Deja de preguntarte si ha valido la pena 
dedicar tantos versos a un tema semejante.

Lo que creías que eran, lo que son, qué más da.

Y qué más da si ahora el sueño no te llega para reconciliarte con los otros, 
los míticos, y rogarles, si tienen sentimientos, que sea mañana, 
para ti, qué más te da, un día distinto
... al fin distinto.

Pedro Gandía

Hechizo

*
Desleal a los dioses de todos tus poemas
por estos bellos ídolos con temporizador
sus cuerpos se suceden como olas en la arena
y como olas se rompen contra tu corazón.

No te forjes ensueños en mundos desvelados 
retírate y acepta el juego de no ser.
Si ayer lo que escribías querrías revivirlo
hoy no querrías saber escribir, lo que vives.

Pedro Gandía



... Qué sabe nadie de nadie

Quién Pudiera

*
Quién pudiera morderte, lentamente,
como a una fruta amarga en la corteza.
Quién pudiera dormir en tu aspereza 
como el día en la sierra del poniente.

Quién pudiera rendir la hastiada frente 
contra el duro confín de tu belleza,
y arrostrar sonriendo la tristeza, 
rota la paz y el paso indiferente.

Quién pudiera, amor, 
la alborotada resistencia del alma distraída
conducir a tu parva apaciguada.

Quién pudiera ostentar, como una brida,
el arco iris sin par de tu mirada, 
desde tu luz, a mi negror caída.

Antonio Cala




Fotografía: Expectation
Por: Sergey Piltnik

Mediterráneo

*
Mi cinturón aprieta tu cintura, y tu sonrisa, mi corazón.
Sobrevolamos las islas indecibles y
 a nuestro paso, las nubes se disipan.
¿Cómo regresar al beso la armonía sin que la respiración se entrecorte?
¿Cómo planear la noche compartida después de tanta ausencia?

Sólo el aire es aliado nuestro
porque nuestro deseo es de aire puro.

Cuando descendamos a la tierra las alas deberán seguir batiendo;
el aire de las alas es nuestro sostén único
y las alas del aire nuestro lecho.

Desembocan los ríos en los mares azules
como en tu pecho desemboca el mar.
Abrázame en tus alas para que otro aire no me roce,
sino tu aliento, del que vivo y muero.

Bajo el cielo impalpable
hecho de luz y espera,
abrázame, amor, con tus alas.

Abrázame sobre la corrompida ciudad sagrada de los hombres.

Antonio Cala



Fotografía : Golden light
Por:  Furstset

Condena

*
A trabajos forzados me condena el corazón, 
del que te di la llave.
No quiero yo tormento que se acabe, 
y de acero reclamo mi cadena.

Ni concibe mi mente mayor pena
que libertad sin beso que la trabe,
ni castigo concibe menos grave
que una celda de amor contigo llena.

No creo en más infierno que tu ausencia.
Paraíso sin ti, yo lo rechazo.

Que ningún juez declare mi inocencia, porque, 
en este proceso a largo plazo, buscaré solamente
...  la sentencia a cadena perpetua de tu abrazo.

Antonio Cala



Fotografía de Svetlana Belyaeva

Maitines

*
Callad, amantes, y ocupad el labio con el beso.  
No pronunciéis palabras vanas mientras 
se busca vuestro corazón en otro pecho, 
jadeante y pobre como el vuestro,
ya al filo de la aurora.

Cuando te poseí por vez primera
tocaban a maitines en el Convento de las Mercedarias.
La tiniebla del aire estremecieron repentinos palomos alterados.

Titubeante el alma sonreía,
 sin comprender por qué, 
en torno a tu cintura.

Y luego, hasta la alcoba recién inaugurada,
fueron entrando laúdes y alabanzas 
que mi alma repetía con orgullo 
suavemente en tu oído.

- Callad amantes y ocupad el labio con el beso.

Antonio Cala



Fotografía: Giving Back
Por:  Ronny Garcia

Arrebátame

*
Arrebátame, amor, águila esquiva,
mátame a desgarrón y a dentellada,
que tengo ya la queja amordazada y entre tus garras la intención cautiva.

No finjas más, 
no ocultes la excesiva hambre de mí que te arde en la mirada.
No gires más la faz desmemoriada y muerde de una vez la carne viva.
Batir tu vuelo siento impenetrable, en retirada siempre y al acecho.

Tu sed eterna y ágil desafío.

Pues que eres al olvido invulnerable,
vulnérame ya, amor, deshazme el pecho y 
anida en él, demonio y ángel mío.

Antonio Cala



Fotografía: Love blind
Por: Monica Lazar

Almuñécar

*
Durante un anochecer en esta playa,
 te amé tanto que una respiración para los dos bastaba.
Suspendieron el mar, para mirarnos,
su armonioso escalofrío, y su unánime vuelo de gaviotas.
Se divertía el agua, sonrosada, como si fuera a amanecer,
y se posó el silencio sobre el aire lo mismo que un jilguero en una rama.
No existía para el amor futuro ni pretérito;
todo era, eterno instante...

Antonio Cala
(extracto)